El Retiro Programado es la opción en la que una persona sigue siendo dueña de sus ahorros, los cuales se quedan en una AFP, que pagará mensualmente la pensión.
Como el pensionado sigue siendo el dueño de sus ahorros, sigue debiendo pagar costos de administración, y puede ganar o perder rentabilidad según el comportamiento del mercado de valores. Además, todos los años, la AFP descuenta las 12 cuotas de pensión pagadas y vuelve a calcular la pensión, por lo que tiende a bajar con el tiempo, incluso pudiendo agotarse.
Por otra parte, mantener la propiedad de sus fondos significa que las personas pensionadas por retiro programado pueden decidir cambiarse a una Renta Vitalicia, en la medida en que sus ahorros les alcancen para contratar una pensión de, al menos, 2 UF mensuales.
Respecto a los beneficios para su familia, el Retiro Programado entrega pensiones de Sobrevivencia por los montos mínimos exigidos por la ley, y si no existe ningún familiar beneficiario de este tipo de pensión, los fondos restantes constituyen herencia.